Se acercan los días calurosos, pero no por eso debes ignorar que luego viene el invierno de nuevo.
Una caldera de gas puede resultar una idea perfecta para que tu casa esté bien calefactada, pero en los últimos tiempos ha habido ciertos problemas que las han dejado en el punto de mira.
¿Es una instalación segura?, ¿qué tienes que tener en cuenta a la hora de instalarla?
Desde nuestra experiencia, podemos ayudar a todos los usuarios de calefacción de gas, a saber con detalle los entresijos de este tipo de instalaciones.
Contacta con nosotros en este mismo enlace para más información.
El gas siempre tiene su peligrosidad y es por eso que en España hay normativas muy estrictas a la hora de instalar cualquier aparato que lo utilice. En el caso de las calderas de gas, todas aquellas que se instalaron a partir de 2013 deben ser de condensación, pero si se sustituye una caldera vieja, entonces deben tenerse en cuenta el tipo de vivienda y de instalación antes de elegir la caldera más adecuada.
Ten en cuenta que:
Por otro lado, en 2015 se aprobó otra normativa que buscaba reducir la emisión de CO2 en España, por lo que las empresas fabricantes de calderas de gas dejaron de fabricar ciertos modelos y tuvieron que colocar etiquetas con información sobre la eficiencia energética de sus equipos.
Merece la pena tener en cuenta la siguiente cuestión, que la nueva regulación del año 2015, no sacó del mercado las calderas fabricadas que no contaban con lo exigido a partir de ese año, y es por eso que aún se puede ver alguna que no cumpla las nuevas normativas.
Esto quiere decir que en cuanto se acaben los equipos que no cumplan la normativa, ya no habrá más en el mercado y solo quedarán las calderas de condensación, las cuales tienen evidentes ventajas:
La instalación de calderas de gas está en el punto de mira no solo por lo que podría causar en el medio ambiente con las altas emisiones de CO2, sino también porque si no se vigila el proceso con detenimiento, existen ciertos riesgos para la salud, que conviene conocer.
Algunos de los peligros de una caldera mal instalada son:
Es por eso que se debe contar en todo momento con un técnico especializado que instale el equipo y que pueda asistir en las revisiones periódicas.
Como hemos mencionado previamente, la normativa europea exige que cuando se instala una caldera de gas, el personal que lo realiza y firma debe estar debidamente autorizado.
Esto se debe a una cuestión de seguridad principalmente, ya que los peligros de una instalación mal realizada no solo incluyen una pérdida de gas que cause un aumento en lo que se paga, sino también otros problemas serios, como explosiones o incendios que pueden provocar daños irreparables y de gran índole.